Thursday, January 31, 2013

Nadar abajo del agua II

En el auto me agarro de la manijita esa que cuelga del lado del copiloto que siempre asumo fue creada para una mujer; una mujer que no se banca la velocidad y se agarra, se aferra, para ver si puede controlar algo. Me agarro entonces y apoyo la nariz en el antebrazo como para distraer la mirada del frente. Olor a cloro en la piel y en el pelo, olor a infancia y domingo aunque sea un jueves.
Al final del verano, cuando era chica, las puntas rubias del pelo se me ponían casi verdes por el cloro que se acumulaba después de días y días nadando abajo del agua. Porque creo que en el verano me pasaba más tiempo abajo del agua que arriba.
-¿Marco…?
-Polo.
-¿Tierra?
-Nadie.
Yo siempre estaba abajo del agua, nadando a toda velocidad, escapándome de algo.

Labels: ,

5 Comments:

Anonymous Marcos said...

Me gustan tus recuerdos acuáticos.

5:48 PM  
Blogger Facundo Landívar said...

Contundente. Me encantó.

8:50 AM  
Anonymous Anonymous said...

Hermoso post. Beso. AC

9:40 AM  
Blogger sofia said...

Las puntas verdes, enloquecia con las puntas verdes de algunas chicas (a mi el pelo se me aclaraba bastante parejo con puntas apenas rubionas, miel (?)) me tenian absorta las puntas verdes de algunas (habia que ser muy rubia).
Nadar abajo del agua es algo que sigo haciendo, un habito que nunca se fue, un placer; claro que ni en pedo un Marco Polo (nunca me divirtio lo suficiente). Olor a cloro. Buen post.

12:17 AM  
Blogger elultimorejondeltarro said...

Tus posts son como dijeron mas arriba "contundentes" no se me ocurre otra palaba (falta de imaginacion en este momento). tiene un fuerza especial.

6:27 AM  

Post a Comment

<< Home