Sounds of Silence

Con esta nota que me deja por debajo de la puerta (cobarde) que firma como si fuese "El Diego" sin el 10 abajo (pedante) y después personalmente (drogado) cuando me toca el timbre, el me informa que piensa armar desmadre durante el fin de semana y me invita formalmente a retirarme de mí casa, de mí cama por su gente, su música de mierda y su volumen. A unos días de irse y después de casi dos años, al nene le vinieron las formalidades.
-¿Tenés claro que venís a ser como la mal cogida del edificio, no? me dice ella.
-Absolutamente, pero la prueba está en que el nene tiene que armar fiestitas con los amiguitos y tocar en la guitarra Wish You Were Here y Knock Knock Knocking on Heaven´s Fuckin Door (que son las únicas dos que se saben) para entretenerse todos los fines de semana. Porque él, claramente no la pone. Y cuando le toca, te juro que me entero.
Para ser una mal cogida soy bastante complaciente porque me terminé armando un bolsito básico y partiendo a lo de los chicos. Bombachita, joggineta para dormir, cepillo de dientes y libro. A veces me sorprendo de lo fácil que puedo pasar al Low Maintenance.
El nene parece que recibió sus visitas nomás. Mientras tanto, yo estaba a cuadras de distancia el otro Palermo durmiendo como un bebé.
Ahora voy a dormir tranquila una vez más, ahora ya no voy a contar ovejitas, ahora solo cuento los días para que se vaya. Se rumorea el miércoles. Los festejos por su partida se hacen en casa.