My kingdom for a cuppa
Dos días en oficina ajena rodeada de gente. Ajena. Me instalo en pequeña mesita redonda mirando el río desde alto y casi no saco los ojos del papel salvo para levantarme y consultar algún tema o contestar preguntas. Un buen cambio para el silencio de estas semanas.
La gente come las cosas más extraordinarias en una oficina, los picnics caseros suelen ser mortales y me hace acordar al colegio, a esas que sacaban ravioles a la bolognesa a las 10 de la mañana. Juro que huelo una salchicha o un embutido del estilo y pienso que es poco apropiado para espacios comunes. Con la cabeza concentrada en el trabajo solo puedo oler café.
Cuando vuelvo a levantar la vista y la nariz, el olor a salchicha se disipó y como por arte de magia escucho a uno de los chicos diciendo que va al Starbucks a comprarse un café. Con la poca confianza que tenemos pienso igual en pedirle uno y lo freno con la mano mientras manoteo el bolsillo de mi campera. El chico además, es clarividente y yo no sabía.
-Dejá. Ya entendí. Y tenés cara de café latte vos.
-Exacto. Tall, por favor...Y gracias.
6 Comments:
En NYC estaba el tamaño "glande" con el que por un rato te sentías colega de Flavio Mendoza.
http://ex-parrot.com/~chris/junk/consumer-whore-logo.gif
Yep, what can I say, definitely a consumer whore when it comes to coffee.
Q le vamo a hacer.
let he who is without sin, cast the first stone.
Ch, me leiste la mente: tambien estoy hace un par de dias en oficina de un cliente, mirando el rio desde las alturas, pensando en los habitos alimenticios en horario de oficina. La diferencia, a esta altura, my kingdom va por un whisky, creo.
jajaaj ilustraste el post con la img, copado =)
La opción de wisky re sale.
Obvio anonymous, estaba buenísima.
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