Redecoración
Cuando se fue de casa, fue más que todo un gran alivio. La dinámica de tres es complicada. Más vale sola y creerme que podía manejarlo todo yo. Solas las dos. Eso era algo que podía controlar.
Cuando se fue, no se llevó mucho. Una valija Samsonite amarilla con alguna ropa, una maqueta que tenía de una antigua fragata (que había pagado una millonada), una cajita de cuero con un león de plata que se ganó en el festival de Cannes, el ratón Mickey en sus varias versiones, la vieja Underwood de abuelo Tito y unas máscaras africanas que habíamos comprado en un viaje.
En casa había un cuarto azul en el que nadie dormía y donde se guardaba todo lo que no tenía otro lugar destinado. Ropa de otras temporadas, el costurero, libros, una moviola vieja. Se ve que alguna vez se cosió algo ahí y con los años pasó a llamarse el "cuarto de costura", aunque nunca más nadie entró ni siquiera con un botón. Ahí, el tenía su mueble; era antiguo de buena madera y una tapa pesada de mármol. Ahí apoyaba su colección de perfumes. Un año se volcó un Paco Rabanne y se ve que el mármol abosorbió todo el perfume y quedó impregnado. Mucho tiempo después que se fuera, me encontré con la naríz pegada al frío blanco y gris. Así huele mi padre, pensé y si me olvido puedo venir a apoyar la naríz acá.
Cuando me mudé me lo traje. Asumí que era parte de mi escasa e improbable herencia. Yo lo puse arriba en mi cuarto y le apoyé mis perfumes y una tele y chucherías.
Ahora tengo un mueble nuevo y este viejo parte en unas semanas. Este mueble se lleva buenas historias.
Cuando se fue, no se llevó mucho. Una valija Samsonite amarilla con alguna ropa, una maqueta que tenía de una antigua fragata (que había pagado una millonada), una cajita de cuero con un león de plata que se ganó en el festival de Cannes, el ratón Mickey en sus varias versiones, la vieja Underwood de abuelo Tito y unas máscaras africanas que habíamos comprado en un viaje.
En casa había un cuarto azul en el que nadie dormía y donde se guardaba todo lo que no tenía otro lugar destinado. Ropa de otras temporadas, el costurero, libros, una moviola vieja. Se ve que alguna vez se cosió algo ahí y con los años pasó a llamarse el "cuarto de costura", aunque nunca más nadie entró ni siquiera con un botón. Ahí, el tenía su mueble; era antiguo de buena madera y una tapa pesada de mármol. Ahí apoyaba su colección de perfumes. Un año se volcó un Paco Rabanne y se ve que el mármol abosorbió todo el perfume y quedó impregnado. Mucho tiempo después que se fuera, me encontré con la naríz pegada al frío blanco y gris. Así huele mi padre, pensé y si me olvido puedo venir a apoyar la naríz acá.
Cuando me mudé me lo traje. Asumí que era parte de mi escasa e improbable herencia. Yo lo puse arriba en mi cuarto y le apoyé mis perfumes y una tele y chucherías.
Ahora tengo un mueble nuevo y este viejo parte en unas semanas. Este mueble se lleva buenas historias.
14 Comments:
como una cosa siempre lleva a otra después pensé en esto: http://palabravirtual.com/index.php?ir=ver_poema1.php&pid=8381
oh, charol.
estará en buenas manos, créame.
Tal vez sea genial derramar un poquito de perfume de cada ser querido en un mueble dedicado, luego pegarle stickers con los nombres de sus respectivos dueños. Habrás descubierto la inmortalidad Ch?
Beso.
¿Pero esto no es ficción?
(Una vez encontré un estante de madera muy viejo en el fondo de casa, con una moldura también de madera. Era chiquito, así que con mi vieja lo lijamos, lo pintamos y lo colgamos, en esa época con mi colección de anteojitos. Hoy todavía lo tengo, soporta a mi reproductor de CD´s y es muy-muy lindo).
gracias, tetra. lo acabo de ver y no lo conocia.
en las mejores, dhorys!
ya no huele a Paco Liyo, se fue todo perfume. Pueda que tenga alguno de los mío.
No matías. No es ficción. Debería?
charlotta la verdad que no sé si estoy muy sensible o tus historias cada vez me pegan más.
te agradezco mucho las sensaciones que me hacés sentir.
besos
el súper anonymous
Esas historias de muebles viejos, me hace acordar a una de mi tio que encontró de causalidad, cuando iba a avender un ropero a un vendedor de muebles usados, un viejo bastón de Jose Felix Uriburu que le había regalado a mi bisabuelo por haberlo metido en el ejercito... Movió al ropero cuando se lo llevaban y algo hizo ...brrrr...toc. Sorpresa!
super anonymous, evidentemente lo que está es ciclotímico porque pasa de odiarme a amarme en el curso de una semana. prefiero la segunda, ojo.
Mi padre tenía una caja llena de estrellas de mar, caballitos de mar fosilizados, y hasta una piedra de boleadoras, entre otras cosas. Ahora la tengo yo, y si bien fui agregando cosas mías en el curso del tiempo, las favoritas de él decoran mi casa en varios rincones.
Hace algún tiempo jugueteando en el parque de la que fue mi familia política y cual arqueóloga urbana vi algo metálico que sobresalía desde un rincón, la perra exigía una y otra vez que le tirara la pelota y yo obsesionada con la 'latita' que veía. Cansada la perra, me aboqué a raspar primero con el pie, luego con una palita de jardín ...y para mi sorpresa había allí una lindísima araña de bronce a la que le faltaban los caireles y un pie con el mismo diseño, chico, ideal para una mesita. Pregunté qué iban a hacer con eso y ante mi pavor pude ver la desidia face to face: 'Hacé lo que quieras, eso vino de Córdoba cuando murió la abuela B., no lo vamos a usar, hay que arreglarlos, es un lío y son cosas viejas'. Ambas piezas fueron a parar a la casa de mis papaes para hacer las reparaciones del caso y en algún momento cuando finalmente nos asentáramos, hacer uso. Nunca ocurrió, el pie y la araña me acompañan en mi ya no nueva vida de soltera porque involuntariamente las cosas quedaron bajo mi custodia y eso me pone contenta, siento que las rescaté y que son valoradas, sobre todo para honrar el recuerdo de B., una vieja cordobesa que murió centenaria y a la que seguramente no le hubiera gustado enterarse lo desamorada que fue su sangre. Como estoy algo cheer up o cocoliche, hora quiero ponerle caireles de colores, pero parece que mi búsqueda va a ser infructuosa, can anybody help??
Linda historia, Charlotte.
Es difícil despojarse de objetos, de muebles, etc. Yo soy un maldito conservacionista. Guardo todo, aún cosas que no tienen tanta historia y que aparentemente son irrelevantes, como notas domésticas ("comprá aceite que se acabó"). Me imagino lo dífícil que debe ser desprenderse del mueble perfumado; yo no sé si podría.
saludos
Veo que tiene nuevos concurrentes mi char, ud siempre tan cool.
bueno, de última armamos feria americana con todo, que se yo..
caireles de colores!! siiiii!!!
uuyy, rex, yo también guardo de esas notitas. eso no es normal, no?
La última nota que encontré guardada de hace años me tuvo descostillándome de la risa durante bastante rato, y decía así:
"01/03/1996 - mido aprox. 1,66, NOOOOOOOOO!"
Eso no sé si es masoquismo o qué, pero me causó mucha gracia las cosas que he llegado a guardar - aún la conservo, obviamente (y en la misma caja).
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